Adquirir una casa es una o incluso la más importante decisión financiera y personal que tomarás en tu vida ya que existe una diversidad de factores que implican compromiso, con uno mismo y con el crédito hipotecario. Todos te pedirán un enganche del inmueble y mensualidades que según los ojos que las miren, podrían ser de cantidades algo grandes, por lo anterior mencionado es importante tener cierta cantidad ahorrada, al fin y al cabo, es dinero que estarás invirtiendo en ti y en algo que es tuyo.

Gasta en lo indispensable

Muchas veces, las personas tienden a realizar gastos que no son necesarios para vivir. Entendemos que dentro de este espectro entra el entretenimiento, por lo que te recomendamos trata de ir una o dos veces menos al estadio de baseball al mes, o bien, cuando vayas al cine compra un combo más chico. Lo anterior son ideas y ejemplos bastante útiles, sin embargo, de lo que más te debes cuidar es de los gastos hormiga, esas compras pequeñas de productos que poco a poco se van a acumulando como el café de la mañana. Una vez que comiences a practicar esto, al final del mes podrías notar la diferencia.

Tus ahorros merecen su propio lugar

Tu sabes cuanto ganas y sabes qué cantidad del total de tu salario deberás invertirlo en necesidades básicas más un par de lujos, sin embargo, del sobrante, no lo tengas en tu tarjeta o cuenta de pila, te recomendamos incluso abrir una nueva donde vayan las cantidades que determines para ahorrar. Muchos bancos pueden apoyarte con esta idea y ayudarte de tal manera que te premiarán cuando acumules ciertas cantidades.

Liquida tus deudas rápidamente

Dentro de lo que esté a tu alcance, te recomendamos minimizar el pago de tus deudas, ¿de qué manera? Liquidándolas. Ese dinero extra que pagas por intereses mes con mes puede ser la diferencia el día de mañana; por supuesto, toda tu atención debería ir dirigida a aquellas deudas que te generan una mayor cantidad de gasto en intereses, sin embargo, el consejo más útil que te podemos dar en este apartado es que no te endeudes más. No porque no puedas solventar el gasto sino porque ese dinero que pagarás en préstamos podrías guardarlo para dar el enganche de tu próximo hogar.

Realiza un esfuerzo extra

Tal vez el dinero que ganas en tu trabajo es suficiente pero si no quieres cambiar nada de tu vida bajo ningún motivo, te recomendamos idear maneras para generar ingresos extra, por ejemplo, si tu actual vivienda es un departamento para dos personas, intenta conseguir un roomie, así ahorrarás en la mitad de gastos o bien, convierte tu casa en un airb&b donde tengas inquilinos cada cierto tiempo. Por último, hay muchos empleos de freelance donde puedes ganar un poco de dinero extra a base del esfuerzo que tú consideres, desde subtitulaje de producciones hasta cursos de inglés.

Al final del día, ahorrar te será muchísimo más sencillo si te planteas objetivos, metas y lugares a donde llegar en tiempo y forma. Si tu propósito es que para final de año tengas en tu cuenta de ahorro determinada cantidad, esfuérzate porque así sea, claro, teniendo en cuenta que durante ese tiempo no tengas ninguna emergencia. Siempre piensa a futuro pues eventualmente este llegará y estar preparado lo más posible puede hacer una gran diferencia sobre cómo lo vivirás.